RECOMENDACIONES Y SUGERENCIAS

En su concepción moderna, la conservación de un recurso natural biótico implica tanto su protección como su explotación racional, (IUCN, 1978), basados ambos aspectos en el conocimiento de la ecología de las especies a conservar. Se hace necesario y urgente trabajar en el cambio de la ética ambiental, que proporcione una nueva racionalidad ecológica, posibilitando a las comunidades y entidades estatales y privadas interactuar adecuadamente con la naturaleza, basado en los principios del cuidado y respeto por la misma, considerándose al hombre como una especie más, que tiene la responsabilidad y la obligación de contribuir al cuidado y conservación de las restantes (Heywood y Watson, 1995).

Siguiendo esta concepción proponemos lo siguiente:

• Ordenamiento del territorio fuera de ANPs con fines de desarrollo. El ordenamiento de la ocupación del territorio es de alta prioridad a futuro. La ocupación de éste y la expansión de las zonas urbanas y de la frontera agrícola se hace actualmente con absoluto desorden. Se destruyen áreas protegidas y restos arqueológicos, se urbanizan áreas agrícolas, destruyéndose decenas de miles de hectáreas de bosques, entre otros.
• Zonificación Económica Ecológica ZEE por departamentos. De manera que permita conocer las zonas para realizar actividades agrícolas, las zonas que son prioritarias para la conservación y donde se ubiquen los espacios turísticos.
• Plantear el uso de la tierra con cierto grado conservacionista. Proponer el explotar la tierra con asociaciones de árboles y arbustos y policultivos; evitando los monocultivos.
• Programas de Conservación de la calidad de suelos. Por medio de una restitución de nutrientes naturales.
• Programas de Capacitación a las comunidades. Para que mejorar el aprovechamientos de los recursos.
• Evitar la quema anual de “regeneración o mejoramiento de pastos”. Práctica que destruye la biodiversidad y agota a la larga los suelos.
• Programas para propiciar la rotación de los terrenos.
• Programas para propociar la crianza de ganado adaptado a la zona.
• Buen manejo de la capacidad de carga de los terrenos.

Es importante incidir en lo siguiente:

• Reforzar el control y monitoreo por parte del Estado en las ANPs.
• Reforzar los aspectos de educación y abrir los canales de participación en el manejo de las ANP para los pobladores ubicados dentro y fuera, involucrándolos en el manejo, protección e importancia de las mismas.
• Asesoramiento técnico por parte del estado en las zonas aledañas a las ANPs con la finalidad de evitar la erosión de las tierras destinadas a la actividad agropecuaria y por consiguiente la invasión de estas actividades (ampliación de la frontera agrícola).
• Las ANPs deben contar con un presupuesto que permita realizar actividades de desarrollo con las comunidades o poblaciones residentes y aledañas a la misma (zonas de amortiguamiento), dar la debida responsabilidad a estas poblaciones de cuidar y respetar el área permitiendo que se utilicen los recursos con un manejo adecuado. De esa forma, éstas poblaciones serán las primeros en cuidar el área de nuevos asentamientos que se quieran posesionarse cerca o dentro del área.
• El SINANPE debe de trabajar de manera coordinada con las regiones y municipios de manera que las autoridades regionales no promuevan la agricultura en espacios que no son aptos y en áreas frágiles.
• Además, el SINANPE debe tener presencia en las áreas para observar y evaluar la problemática para proponer acciones y así evitar el crecimiento desmedido de estos problemas.